Mi amigo, Peter Broad, estudioso de mis engendros literarios, conferencista, académico norteamericano, mormón, mi ocasional traductor, escribió para su congreso en Indiana, Penn, la siguiente ponencia, en la que sigue la huella de los premios que algunos desorientados me han otorgado a lo largo de los años. Mi otro gran amigo, el poeta español y actor de telenovelas violentas Franciso Cenamor, lo reprodujo en su blog Asamblea de Palabras, uno de los más visitados en la península ibérica. Púchale abajo y veredes