El oficio de terminar una novela
abril 04, 2015![]() |
Avanzando en el manuscrito final |
Así trabajo yo las novelas. A veces paso uno o dos años sin escribir nada importante. Pero cuando me llega me llega. Y lo confieso: me admiro. Soy un ególatra asumido y a eso atribuyo mi disciplina (mis disciplinas). Le doy las gracias a la poeta española Beatriz Russo, quien me escribió que si la egolatría me daba para escribir novelas (Beatriz hasta donde sé no ha leído nada mío) vale la pena ser ególatra. He trabajado de 14 a 16 horas diarias (y claro, durante esos días no he salido ni a nadar ni a jugar básquet ni a la oficina ni he traído las tortillas ni he ido al mercado) y que se joda el mundo.
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Esquemas-índices de los varios borradores |
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